Razones para Considerar una Boda Pequeña
Si bien la pandemia ha alterado la manera en la que organizamos las bodas y otros eventos sociales, hay muchas más razones para considerar una boda pequeña. Durante el confinamiento, muchas celebraciones fueron pospuestas o canceladas. Ahora que se han levantado las restricciones, es posible que tus prioridades hayan cambiado.
No sorprende que las bodas pequeñas hayan recibido mucha atención en el último año. Y es que resultan geniales.
Pero, ¿qué es una boda pequeña? Usualmente es aquella que suele acoger de 20 a 60 invitados. Si los asistentes son menos, entonces, sería una microboda. Incluso podrías valorar apostar por el minimalismo absoluto: ¡las fugas son increíblemente populares! Son una excelente opción si tu presupuesto es limitado pero quieres casarte. Sí, ¡estamos bromeando!
Planear una boda pequeña no significa que tengas que renunciar a los detalles que son importantes para ti. Con una lista de invitados ajustada, puedes crear una experiencia única e inolvidable.
No te gustan las multitudes
Una gran boda clásica no es para todos. Sin duda, un evento más pequeño es mejor idea si no te gustan las multitudes y tampoco ser el centro de atención ante un buen número de personas. De este modo, simplemente estarás entre amigos y los familiares más cercanos, es decir, con quienes te sientes a gusto.
Tu presupuesto es ajustado
Siendo realistas, el dinero es un filtro muy importante. Es más, muchas parejas prefieren invertir en artículos que durarán toda la vida en lugar de en una boda. Si tú o tu pareja habéis estado haciendo malabarismos con el dinero durante el confinamiento, disfrutar de una boda íntima con menos invitados será un alivio para vuestro bolsillo.
Tienes ya un lugar de ensueño en mente
Las bodas pequeñas se prestan maravillosamente a lugares más íntimos. Es posible que tengas la mirada puesta en un lugar de ensueño que solo pueda albergar a unos pocos invitados.
Si no tienes un rincón específico en mente, siempre puedes optar por un espacio pequeño pero único para celebrar tu ceremonia o fiesta: una cabaña en la montaña, una estancia encantadora en una casa de época, una pequeña capilla romántica, un jardín, un pequeño barco, etc. En cuanto empieces a buscar, encontrarás un sinfín de opciones.
Quieres priorizar lo más importante
Al limitar la cantidad de invitados, puedes dedicar una mayor inversión al vestido, los zapatos perfectos para la boda, las flores, la comida y los arreglos de mesa, ¡todo lo que desees! El hecho de que optes por una boda pequeña no significa que no puedas tener el día de boda más bonito y hermoso posible.
Tal vez te gustaría gastar más dinero en regalos para tus invitados o en contratar a tu banda musical favorita. Incluso, así podrás ahorrar para planear una lujosa luna de miel en algún lugar exótico.
Quieres que el día de tu boda sea más manejable
Una gran boda puede suponer mucho estrés, algo que muchas personas no pueden permitirse. Es mucho más fácil impresionar a menos personas, especialmente si son invitados cercanos.
En una boda pequeña tendrás menos preocupaciones. Solo invita a tus amigos y familiares más próximos para una fiesta más relajada. Es poco probable que el día de tu boda estés sin nada de estrés, pero algo es algo.
Al organizar una boda, tú decides qué tipo es la mejor. Eso sí, ¡siempre que encaje en tu presupuesto! Las bodas pequeñas están hechas para ser especiales, íntimas e inolvidables.